Se trata del ZEHST (siglas inglesas de
Transportación Hipersónica de Cero Emisiones), un avión que alcanzará
los 5.000 kilómetros por hora, es decir cinco veces la velocidad del
sonido, pero con bajas emisiones contaminantes gracias a que usará
combustibles biológicos.
Pero los asistentes al salón parisino, considerado la mayor
exhibición de la industria, verán sólo la maqueta del ZEHST que será lo
que mostrará el consorcio europeo EADS (siglas inglesas de la Compañía
Aeronáutica Europea de Defensa y del Espacio).
EADS, la casa propietaria del fabricante europeo Airbus, no piensa desarrollar el proyecto.
Adelante del Concorde
Hace 8 años cesaron los vuelos del hasta ahora único avión supersónico de uso comercial, el Concorde.
Con relación a su predecesor, el ZEHST volará al doble de la
velocidad, aunque transportará entre 60 y 100 pasajeros, frente a los
120 del Concorde.
Las tres horas que le tomaba a aquel volar entre París y Nueva York, se reducirían a hora y media con el nuevo aparato.
A diferencia del descontinuado jet supersónico
franco-británico, el futuro avión usará biocarburantes a base de algas
marinas con una mezcla de hidrógeno y oxígeno.
El despegue del ZEHST se hará con turbinas
clásicas hasta los 5 kilómetros de altura, donde un cohete del tipo
usado en los cohetes Ariane lo llevará hasta 2,5 veces la velocidad del
sonido.
A los 23 kilómetros de altura (el doble de la
usada por los aviones comerciales actuales) otro grupo de reactores lo
llevará hasta su altura definitiva (32 kilómetros) y velocidad de
crucero Match 5 (5.000 km/h)
A 32 kilómetros de altura minimizará su impacto sónico, uno de los defectos que se le atribuían al Concorde.
"Nada nuevo"
El avión está siendo desarrollado en colaboración con técnicos de Japón."No es un Concorde pero luce como un Concorde, lo que muestra que la aerodinámica de 1960 era muy inteligente", dijo el jefe técnico de EADS, Jean Botti.
"ZEHST no incluye ninguna novedad. Todas son cosas que se han creado antes", aseguró Botti, quien estima que su empresa podría realizar una primera prueba no tripulada para el 2020.
A pesar de que la tecnología ya existe y es cuestión de adaptarla, podría pasar hasta medio siglo antes de ver un ZEHST operando en algún aeropuerto, según dijo el jefe de EADS, Louis Gallois.
"No estamos hablando de un producto que vamos a lanzar en los próximo años. Tenemos que ver la seguridad, la integración de diferentes tecnologías, cómo los humanos reaccionan" Gallois.
La forma aerodinámica del ZEHST sigue los principios
ya usados en su predecesor, el Concorde.