Con esta apertura, Nueva York desbancaría al MacStore de Covent Garden, en Londres, sede hasta ahora del local más grande de Apple, con 1.500 metros cuadrados.
Por una superficie mayor, circularán en la ciudad de los rascacielos los más de 700.000 visitantes diarios de la estación. Son viajeros de metro y tren, turistas, simples curiosos o comensales que acuden a los más de 35 restaurantes que cobija el techo de la terminal, escenario de películas como Con la muerte en los Talones o Armageddon.
Aún no se ha revelado la ubicaci
ón concreta de la nueva tienda, pero, al parecer, podría tratarse de un espacio ocupado actualmente por uno de esos restaurantes. Todo apunta que el local elegido sería el que ha cobijado hasta ahora a Métrazur, un restaurante del célebre chef Charlie Palmer. Sea cual sea el lugar, lo único que parece claro es que Apple deberá hacer un desembolso extra para pagar el leasing de los contratos de arrendamiento actuales, pues no hay ningún local libre en toda la terminal.
Con esta apertura, Jobs quiere conmemorar por todo lo alto el décimo aniversario de la primera tienda de Apple, por lo que el gran anuncio tendría lugar durante el próximo mes. En los planes figura abrir en otoño, bajo el nombre de Apple Store Grand Central, un serio competidor de la famosa tienda en forma de cubo de la Quinta Avenida de la empresa. Este local, que está abierto las 24 horas, genera una ventas anuales de US$ 450 millones. Casualmente, acaban de empezar las obras en este comercio –una de las imágenes más fotografiadas de Nueva York– para renovar los cristales del cubo. Apple tiene otros tres establecimientos en la ciudad.
